En esta fría noche,
tu luz me guía,
tu luminosidad es mi amanecer,
y si tú me faltas,
siento sobre mis hombros
caer la eterna y fría noche,
una noche infinita,
sin estrellas, sin la estrella
más bella que mis ojos conocieron,
tú, tu rostro y tu roce
son mi aliento de vida,
mi soplo de juventud y felicidad,
solo te pido una cosa,
date a mi, como las olas
se dan a la mar.